martes, 2 de abril de 2024

Retratos de compositores del Romanticismo

Este es el enlace para descargar los retratos de compositores del Romanticismo, y poder así concluir la lámina de los compositores en la Historia de la Música:

lunes, 1 de abril de 2024

Preguntas-guía sobre la música instrumental en el Romanticismo

En el siguiente enlace se pueden descargar las preguntas-guía sobre el tema de la música instrumental en el Romanticismo:

Preguntas sobre la música instrumental en el Romanticismo

domingo, 31 de marzo de 2024

Tema 7º: Música instrumental en el Romanticismo

El Romanticismo es un periodo de la Historia de la Música y del Arte en general que comprende más o menos el siglo XIX, si bien los límites de su duración no siempre están claros. Se suele decir que el Romanticismo comprende aproximadamente desde principios del siglo XIX hasta principios del siglo XX (1914).

Esta es una época que se caracteriza por los sentimientos y la sensibilidad desbordados. Es decir, que el sentimiento, la fantasía y las emociones son más importantes que la razón. Hay a menudo un gran interés por la imaginación y por los ambientes misteriosos y lúgubres. Así lo reflejan la obra de grandes escritores y pintores de la época.

Desde el punto de vista político, el Romanticismo es un periodo clave en la historia. Muchos de los países modernos se formaron en esta época, como es el caso de Italia y de Alemania (que hasta el siglo XVIII no existían como países, sino que eran multitud de pequeños estados), y de la mayoría de los países Sudamericanos, que se independizaron del Imperio Español.

Respecto a la música, cada periodo de la historia ha tenido su importancia desde el punto de vista musical, pero sin duda el siglo XIX es el más importante de todos los periodos, pues la gente en esa época pensaba que la música era la más importante de las artes. Casi todo el mundo hablaba de música, acudía a los teatros si se lo podía permitir, los periódicos escribían de música cada día, e incluso se hacía música en muchas casas. La música era, en definitiva, la más romántica de las artes.

Como prueba de su importancia está el hecho de que en las principales ciudades europeas y americanas se construyeron teatros para la ópera, y se fundaron algunas de las orquestas más antiguas que existen hoy en día: en Viena, en París, en Madrid, en Barcelona,…

La música romántica tiene unas características propias que la distinguen de la música de otros periodos de la historia. Podemos resumirlas en los tres siguientes puntos:

- Esta música considera más importante la expresión de las emociones que la forma de la música misma.
- Las melodías románticas son apasionadas, y las armonías son ricas y variadas.
- A lo largo del siglo XIX la orquesta crece mucho, hasta llegar a la gran orquesta posromántica.

Vemos así que las emociones son muy importantes en la música; lo que persigue un compositor con su música es que el espectador se emocione con ella. Esto es lo principal en una obra musical, más que la forma que pueda tener la música, su equilibrio, o cualquier otra cualidad. Y esa expresión lo consigue mediante melodías muy apasionadas, que llegan directamente al corazón, y unas armonías y una orquestación muy variada y colorista, llena de contrastes.

Como sucede con todo periodo de la historia extenso, éste se suele dividir a su vez en varios subperiodos, habitualmente en tres. Así, el Romanticismo se puede dividir en las siguientes etapas:

- Primer romanticismo: desde comienzos del siglo XIX hasta mediados del siglo.
- Segundo romanticismo: desde mediados del siglo XIX hasta la década de 1880.
- Posromanticismo: desde la década de 1880 hasta principios del siglo XX.

Son muchos los compositores importantes del Romanticismo, cuya música forma parte hoy día de los programas de concierto de cualquier orquesta del mundo. Algunos de los más importantes (aunque no todos) serían los siguientes:

- Primer romanticismo: las últimas obras de Beethoven, Schubert, Mendelssohn, Schumann, Chopin.
- Segundo romanticismo: Liszt, Wagner, Brahms, Verdi.
- Posromanticismo: Mahler, Richard Strauss, Bruckner.

El piano es el gran instrumento inventado en el Romanticismo, instrumento potente y de gran expresividad, idóneo por tanto para la expresión de los sentimientos románticos. En el siglo XVIII (en la época de Mozart) lo que existía era el forte-piano, un instrumento parecido, pero no es el piano romántico, que es el piano moderno que hoy día conocemos. Se inventaron dos tipos de piano: uno grande (de cola) para las salas de concierto, y otro de pared (o vertical) para las casas. Éste último ocupaba poco espacio, era como un mueble más en las casas burguesas.

La importancia del piano durante el siglo XIX fue impresionante. Prácticamente no había hogar de nivel social medio-alto donde no hubiera un piano, el cual tocaba algún miembro de la familia, y servía para amenizar las fiestas cantando canciones en familia o entre amigos. Cualquier muchacha de clase media y buena educación debía saber tocar el piano, por lo que muchos músicos se dedicaron a dar clases particulares a señoritas de la burguesía.

Como consecuencia del gran apogeo del piano, creció toda una industria alrededor de este instrumento. Se fabricaron pianos a millares, y se compusieron miles y miles de obras. Además de las obras extensas para concierto (como sonatas, conciertos para piano y orquesta, etc.), se compusieron multitud de pequeñas piezas para piano, que recibieron distintos nombres según su carácter o su funcionalidad: nocturno, estudio, balada, polonesa, mazurca, etc. Algunas de estas piezas servían para el estudio del instrumento, otras estaban basadas en alguna danza (mazurca, polonesa, polca), otras son más bien poéticas (nocturno, balada), etc.

Se puede decir que la práctica totalidad de los compositores del Romanticismo eran buenos pianistas, pero algunos de ellos fueron excepcionalmente buenos. Entre los mejores podemos citar al menos a tres: Frédéric Chopin, Robert Schumann y Franz Liszt. Chopin dedicó toda su vida exclusivamente al piano. Por su parte, Franz Liszt era el pianista más famoso y cotizado de su época. Era aclamado en todas las ciudades como un ídolo, y sus conciertos provocaban la admiración de todo aquel que lo escuchaba. Ganó muchísimo dinero y admiración como intérprete de piano, más que como compositor.

Pero aparte del piano, lo más atractivo de la música del Romanticismo es la música sinfónica. Y es que el siglo XIX es el gran siglo de la orquesta. Desde principios de siglo hasta finales la orquesta crece muchísimo, llegando a haber grandes orquestas de más de cien músicos, con todo tipo de instrumentos de cuerda, viento y percusión. Los instrumentos de viento mejoran muchísimo su técnica y su calidad de sonido.

De esta manera, casi todos los grandes compositores de esta época compusieron música para orquesta, especialmente conciertos para un instrumento solista y orquesta, y sinfonías.

Se puede decir que la sinfonía se convirtió en la gran forma musical para orquesta, por lo que hubo grandes sinfonistas en este periodo. Algunos de los más importantes sinfonistas del Romanticismo fueron:

- Franz Schubert: 9 sinfonías.
- Félix Mendelssohn: 5 sinfonías.
- Robert Schumann: 4 sinfonías.
- Anton Bruckner: 9 sinfonías.
- Johannes Brahms: 4 sinfonías.
- Anton Dvorak: 9 sinfonías.
- Tchaikovsky: 6 sinfonías.
- Gustav Mahler: 9 sinfonías.

Durante el Romanticismo los compositores cultivaron prácticamente los mismos géneros musicales que habían compuesto los compositores clásicos, tanto en música de cámara, como en música sinfónica, y también en música vocal.

Sin embargo, uno de los principales inventos de este periodo sería la música programática. Ésta se puede definir como un tipo de música sinfónica que sigue un tema o programa literario, el cual inspira la obra. Las dos formas de música programática son: la sinfonía programática, y el poema sinfónico. Los primeros compositores en componer este tipo de música fueron Héctor Berlioz y Franz Liszt.

La sinfonía programática consistía en una sinfonía (con sus tres, cuatro o más movimientos), pero con ella se pretendía contar alguna historia o relato, sólo con los sonidos de la orquesta. Un ejemplo podría ser la sinfonía “Harold en Italia”, de Héctor Berlioz, donde la orquesta trata de describir todos los acontecimientos que el personaje, Harold, vive en su viaje por Italia, tal y como se relatan en el libro.

Por su parte el poema sinfónico es una pieza en un solo movimiento, que suele durar entre 5 y 15 minutos, e igualmente trata de describir con los sonidos de la orquesta una historia o relato literario.

El Romanticismo también supuso el apogeo del nacionalismo musical. Éste se puede definir como aquella música que busca la esencia nacional haciendo uso de la danza y la canción folclórica de un país o región.

Los países donde el nacionalismo se desarrolló con mayor fuerza fueron aquellos en los que hasta el siglo XIX no habían tenido una gran tradición musical internacional, como era el caso de Italia, Francia, o incluso Alemania desde el siglo XVIII. Por tanto, sería en Rusia, en Centroeuropa, en los países escandinavos, y también en España, donde surgirían los más importantes compositores nacionalistas del siglo XIX, los cuales utilizaron en sus obras elementos musicales propios de su folclore nacional.

Algunos de los más importantes compositores nacionalistas fueron:

- En Rusia: Glinka, Rimski-Korsakov y Mussorgsky.
- En Centroeuropa: Smetana y Anton Dvorak.
- En España: Enrique Granados e Isaac Albéniz.



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martes, 20 de febrero de 2024

Retratos de compositores del Clasicismo

En el siguiente enlace se pueden bajar los retratos de compositores del Clasicismo, para utilizarlos en las actividades que se propongan.

Preguntas-guía sobre el tema de la música instrumental del Clasicismo

En el enlace de abajo se pueden obtener las preguntas-guía del tema sobre la música instrumental del Clasicismo:

Tema 6º: La música instrumental del Clasicismo

El Clasicismo es un periodo muy corto de la Historia de la Música, pero también muy intenso e importante, aunque sólo sea porque es la época de tres de los más grandes músicos de toda la historia: Haydn, Mozart y Beethoven. Dura aproximadamente unos 50 años, es decir, la segunda mitad del siglo XVIII, hasta principios del siglo XIX (aunque ya se sabe que los límites son siempre aproximados y varían de un país a otro).

Políticamente se van a producir dos acontecimientos que van a marcar el futuro de la Humanidad: la Revolución Francesa, y la Independencia de los Estados Unidos.

Pero desde el punto de vista artístico hay un nuevo estilo que marcará a todas las artes. Y es que se busca un nuevo arte caracterizado por el equilibrio, la proporción, la claridad, la serenidad y la sencillez. Si en el Barroco el arte se caracteriza por la exuberancia y lo recargado y exagerado de los adornos, el Clasicismo será todo lo contrario, se considera lo más bello y hermoso aquello que es sencillo, sin muchos adornos, bien proporcionado y bien equilibrado. Pueden observarse todas estas características viendo las pinturas y los edificios de esta época, edificios sencillos, equilibrados y simétricos.

También así será en la música del Clasicismo. De esta manera, la “música clásica” (cuyo nombre viene de Clasicismo) se construye con estas características:

- La melodía es lo más importante en este tipo de música, formada casi siempre de 8 compases, y buscando la simetría.
- El lenguaje musical es plenamente tonal, tal y como ocurría a finales del Barroco.
- Las melodías clásicas van acompañadas de un relleno armónico sencillo.

La música del Clasicismo es el reino de la melodía, que se convierte así en lo más importante de la música. Todos los demás elementos (armonía, ritmo, instrumentación) están al servicio de la melodía, que es lo más importante. Y estas melodías son sencillas y equilibradas, casi siempre de 8 compases, porque el número 8 es completamente simétrico y se puede dividir por 2 varias veces.

Tal y como ocurría ya en el último Barroco, el lenguaje musical del Clasicismo es plenamente tonal, donde el acompañamiento de sus melodías es un acompañamiento sencillo, con sencillos acordes en armonía tonal.

Los géneros de música instrumental del Clasicismo podemos dividirlos en aquellos que son de música para orquesta (lo que se llama música sinfónica), y música de cámara (música para pequeños grupos instrumentales). Así, en música orquestal, los dos géneros musicales más importantes serán: el concierto para un instrumento solista y orquesta por un lado, y la sinfonía por otro lado. En cuanto a la música de cámara, se compondrán obras para todo tipo de agrupaciones camerísticas: sonatas, tríos, cuartetos, quintetos, sextetos, etc.

El término sonata en el Clasicismo tiene un significado diferente al que tenía durante el Barroco, por lo que la sonata clásica es distinta a la sonata barroca. En primer lugar, la sonata clásica podía ser compuesta para piano solo, o bien para un instrumento solista acompañado de piano. Además, adoptó un esquema fijo en cuatro movimientos: el primero un movimiento rápido; el segundo un movimiento lento; el tercero un minueto; y el cuarto un movimiento rápido.

Este esquema de la sonata adquirió una gran importancia, porque fue tomado como modelo para casi toda la música instrumental del Clasicismo. Es por ello que tríos, cuartetos, quintetos, sextetos, etc., no eran más que sonatas compuestas para estos grupos de instrumentos, siguiendo el mismo modelo que el de una sonata para piano con sus cuatro movimientos.

En lo que respecta a la orquesta del Clasicismo, ésta experimenta grandes cambios en comparación con el Barroco. Para empezar, crecen mucho sus dimensiones, tanto en lo que respecta a los instrumentos de cuerda frotada como a los de viento. Los clarinetes, un invento del siglo XVIII, se incorporan como un instrumento más de la orquesta. Además, durante todo este siglo va mejorando progresivamente la construcción de los instrumentos de viento, consiguiéndose cada vez un mejor sonido. Todo ello contribuyó a que la música para orquesta fuera muy importante en este periodo.

El concierto en el Clasicismo era también bastante diferente al concierto barroco. Ya no se acompañaba de bajo continuo, y tampoco existía ya el concerto grosso. Lo normal era el concierto clásico para un único instrumento solista acompañado (o en diálogo) con toda la orquesta. A veces había conciertos para más de un solista, pero son muy pocos. Los conciertos que más se compusieron durante el Clasicismo fueron para piano o para violín y orquesta.

Pero la gran invención del Clasicismo en cuanto a música orquestal será la sinfonía. Puede ésta definirse como una gran sonata para orquesta, que adoptó por tanto el mismo esquema formal que la sonata: primer movimiento rápido; segundo un movimiento lento; el tercero un minueto; y el cuarto un movimiento rápido.

Si lo normal en cada periodo de la historia es que haya muchos compositores (aunque no todos igual de buenos ni de importantes), el Clasicismo estuvo dominado por tres compositores que son de los más grandes de toda la historia.

El primero (en antigüedad) sería Joseph Haydn (1732-1809), que tuvo una larga vida, pues fue contemporáneo del padre de Mozart (Leopoldo Mozart), y llegó a vivir más que ningún otro miembro de la familia Mozart, pues murió en el siglo XIX. Haydn se considera el verdadero inventor del cuarteto de cuerda y de la sinfonía, por eso se le puede llamar el padre del Clasicismo, pues de él aprendieron muchos músicos posteriores. Entre la amplísima obra que compuso, podemos destacar la siguiente:

- 104 sinfonías.
- Numerosos conciertos para diversos instrumentos.
- 83 cuartetos de cuerda.
- Varios oratorios, entre ellos “La Creación” y “Las estaciones”.

Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791) es uno de los más grandes músicos de la historia. Hijo de una familia de músicos, su padre Leopold Mozart tenía un buen cargo como violinista en Salzburgo (Austria), y sus hermanas también eran músicos, aunque nadie en la familia tenía tanto talento como él. A los cinco años ya dio su primer concierto, y con doce años incluso compuso una ópera. La familia Mozart, como se dijo antes, siempre tuvo una estrecha relación de amistad con Haydn.

A pesar de haber vivido tan sólo 35 años, la obra de Mozart es muy amplia, incluyendo óperas y todo tipo de géneros instrumentales. Algunas de sus obras son:

- 41 sinfonías.
- Numerosos conciertos para diversos instrumentos, la mayoría de ellos para piano y orquesta.
- 22 óperas.

Ludwig van Beethoven (1770-1827) es otro de los grandes genios de la música. Vivió entre los siglos XVIII y XIX, y por eso se le considera el compositor que cerró el Clasicismo y abrió el nuevo periodo del Romanticismo. Su obra no es tan extensa como la de Mozart o la de Haydn, pero toda ella es considerada como obra maestra, llena de energía y originalidad. Y ello a pesar de haberse quedado sordo progresivamente durante los últimos años de su vida. Entre sus principales composiciones podemos destacar:

- 9 sinfonías.
- 7 conciertos.
- 32 sonatas para piano.
- 17 cuartetos de cuerda.
- Una ópera (“Fidelio”) y dos misas.



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Preguntas-guía sobre el tema de la música instrumental barroca

A continuación se pueden descargar las preguntas-guía sobre la música instrumental del Barroco: